El organismo aseguró que aunque se aceleren los procesos no se tomarán atajos en materia de seguridad. En agosto Pfizer comenzará sus pruebas en la Argentina.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguró este miércoles que la gente no empezará a ser vacunada antes “de la primera parte de 2021” de acuerdo al estado de las investigaciones para lograr una vacuna contra el nuevo coronavirus Covid-19.
«Hay que ser realistas en cuanto a los tiempos, no importa cuánto intentemos acelerar el proceso, tenemos que estar seguros de que una vacuna es segura y efectiva, y esto toma su propio tiempo», dijo el director de Emergencias Sanitarias de la OMS, Mike Ryan.
«Estamos apurando las cosas todo lo que se puede, pero no significa bajo ninguna circunstancias que vamos a tomar atajos en lo referido a la seguridad», recalcó el médico y alto directivo de la OMS en una sesión informativa dirigida al público en general a través de las redes sociales.
Ryan recordó que ninguna vacuna es 100% efectiva y mencionó el caso de la que existe contra el sarampión, considerada entre las que tienen mayor efectividad y que llega al 95%.
Además, se hizo hincapié en que otro aspecto a tomar en cuenta será la duración de la inmunización que ofrezca la vacuna.
Cada vez son más las vacunas -entre las 23 que llegaron a etapas más avanzadas en investigaciones en distintas partes del mundo- que están ingresando a la Fase 3, que implica que luego de haber mostrado ser seguras y cierta eficacia, pueden empezar a ser administrada a miles de personas.
En esa sesión, en la que también participó la responsable técnica María Von Kerkhove, se recordó que no hay que tener expectativas desmesuradas y creer que la vacuna será una solución absoluta.
En tanto, el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación Roberto Salvarezza dijo, acerca de los proyectos científicos que están desarrollando una nueva vacuna contra el coronavirus, que “en agosto Pfzier comienza a probar su vacuna en el país”.
Esa vacuna ya pasó las fases 1 y 2, es segura y no causa daños; a partir de ahora se comenzará a probar con muestras más grandes», explicó en diálogo con en El Destape Radio.
El ministro sostuvo que está “previsto que las vacunas llegarán al país para encarar la etapa del invierno que viene” y añadió que “hoy todo el planeta está detrás de la vacuna, estamos hablando de cientos de miles de millones de dosis».
Por su parte, el infectólogo Tomás Orduna, integrante del grupo de asesores del presidente Alberto Fernández, indicó ayer a la agencia de noticias Télam que la vacuna que el laboratorio Pfizer desarrolla con voluntarios argentinos en el país apunta a tener sus primeras respuestas «en diciembre, cuando sea el otoño europeo, donde se espera una segunda ola del coronavirus», y puede estar disponible «para marzo o abril» del 2021.
“No sólo hay que lograr una vacuna y compartir esa patente, sino que, además, deberá haber una cooperación entre todos los actores mundiales», sostuvo.
«Esta vacuna comenzó a diseñarse en febrero, normalmente los procesos de elaboración en sus distintas fases tardan más de un año, pero se aceleraron todos los pasos porque este virus puso en jaque al mundo», recordó Orduna.
Pfizer desarrolla su vacuna principalmente en Estados Unidos y en una minoría en Alemania y en Argentina.
Aquí, será el Hospital Militar Central el que pondrá su estructura edilicia para realizar las pruebas.