Se trata de casos sospechosos, a los que tuvieron que asistir mecánicamente debido a la complejidad de los cuadros.
Las autoridades provinciales revelaron en el parte diario correspondiente al COVID-19 que hay seis personas en total internadas en el nosocomuo infantil Juan Pablo II.
De dichos pacientes, solo uno dio positivo al test, mientras que el resto espera los resultados.
Tres individuos tienen la situación más complicada, ya que respiran gracias a un aparato de asistencia respiratoria mecánica.