El hecho sucedió semanas atrás en inmediaciones de Lomas de Vallejos, en un paraje de dicha localidad. El religioso habría viajado desde Capital con síntomas y llevó el virus que terminó afectando a varias familias, incluído un bebé.
Por dichos contagios se agravó la salud de una de las personas que participó de la reunión clandestina, precisamente un hombre de 89 años, quien finalmente murió en las últimas horas en el Hospital de Campaña.
En el recinto sanitario todavía sigue internado un hijo de la víctima, también afectado por COVID-19.