Es por una decisión propia de los comerciantes, ya que consideran que los vallados extremos que pondrán en la zona de la Costanera perjudicarán la llegada de clientes.
Si bien un grupo de dueños de emprendimientos gastronómicos y bailables acompaña la decisión de la Municipalidad de abrir hasta las 5 o 6 de la mañana durante 24 y 31, decidieron que no abrirán sus puertas.
Pidieron además que se mantenga la medida en el tiempo, y que no vuelvan las restricciones luego de las fiestas.
Finalmente consideraron que, de seguir prohibiendo la apertura de dichos lugares y llenarlos de vallas, lo único que conseguirán será que los jóvenes y adultos vayan a fiestas clandestinas.