El gobernador Jorge Capitanich participó, este jueves, de la Reunión Regional de Jefes de las Unidades de Atención Integral (UDAI) de Anses, que se lleva a cabo desde ayer en Resistencia. Referentes del organismo de Misiones, Chaco, Formosa y Corrientes se dieron cita en la provincia para aunar criterios y definir líneas de acción a fin de optimizar las prestaciones del organismo en toda la región.
En ese marco, el mandatario chaqueño llamó a los funcionarios a trabajar mancomunadamente para fortalecer el sistema de seguridad social en el Norte argentino y extender sus beneficios a todos los ciudadanos y las ciudadanas que lo requieran. Agustín Aleman, jefe regional de Anses Chaco, destacó la importancia del encuentro y brindó precisiones sobre el temario.
“Estamos aquí para definir lineamientos y objetivos de este año en el que necesitamos redeterminar muchos derechos, arrancando por la Asignación Universal por Hijo”, indicó.
En los últimos años, un número importante de beneficiarios quedaron afuera del programa debido a que no presentaron las libretas correspondientes, por lo que se trabaja ahora en un esquema para incorporarlos nuevamente. “No se trata de beneficiarios, sino de titulares de derechos por lo que iremos a buscarlos para reivindicarlos”, dijo el funcionario, haciéndose eco de las palabras del gobernador.
Ingreso Familiar de Emergencia, aportes de ATP y Créditos Argenta, son otro de los ítems que integran la agenda de la reunión. Aleman precisó que los indicadores marcan una reactivación de la actividad económica que permitió que muchos emprendimientos y comercios vuelvan a generar ingresos para afrontar el pago de sueldos, sin depender del aporte de ATP.
Mario Espert, de la UDAI de Posadas, destacó el trabajo de Anses durante la pandemia, en la implementación de importantes políticas sociales como el IFE. “En Misiones hubo casi 300 mil beneficiarios y en sus distintas etapas el IFE implicó un movimiento de nueve mil millones de pesos”, graficó y valoró el aporte llevado a cabo a través de ATP para cubrir el pago del 50 por ciento de los salarios de trabajadores del sector privado.