El cortejo fúnebre con los restos de Carlos Menem partió desde el Congreso a las 15.45 con destino al cementerio islámico de La Tablada, donde fueron inhumados junto a los de su hijo Carlos Menem Jr.
El féretro fue recibido en el cementerio por bandas militares y personal de la Policía Federal, la Policía Bonaerense, la Fuerza Aérea y Gendarmería Nacional. Además, fue trasladado por los Granaderos hasta el lugar en el que se llevó a cabo la ceremonia íntima.
Allí lo despidieron los familiares, que contaron con la presencia de Aníbal Bachir Bakir, presidente del Centro Islámico de la República Argentina (CIRA), quien leyó un pasaje del Corán.
El velatorio, que había comenzado a las 7 de la mañana en el Salón Azul del Senado de la Nación, se extendió hasta las 15. Por disposición de la familia del fallecido ex mandatario, el ingreso del público al Palacio del Congreso se había cerrado a la medianoche.
Pasadas las 9.30 arribó a la Cámara Alta la hija del ex Presidente, Zulemita Menem: “Mis hijos están muy tristes, porque se fue el abuelo, y era un gran abuelo”. “Les quiero agradecer a todos, sobre a los médicos que cuidaron a mi papá hasta último momento, no lo dejaron ir”, agregó entre lágrimas.
Dirigentes políticos, empresarios y sindicalistas enviaron arreglos florales para despedirlo. Entre las 37 coronas que llegaron al lugar se encuentran las enviadas por el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner y su familia. También enviaron ofrendas florales el Senado de la Nación, el Ministerio de Relaciones Exteriores; la Auditoría General de la Nación y el Club Atlético River Plate; y su hermano Eduardo Menem y familia.
Además, llegaron coronas del presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; del exministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires León Arslanian y familia; del gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela; y del mandatario de la provincia de Córdoba, Juan Schiaretti, así como de Anillaco, su pueblo natal.
Asimismo, se recibieron coronas del secretario General de Empleados de Comercio, Armando Cavalieri; la familia Lingieri; el intendente de Ezeiza, Alejandro Granados, y su esposa Dulce Granados; el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, así como de la Familia Bagó, la empresa Toyota Argentina, la embajada de México y de Kuwait.
Lo mismo del presidente del bloque de diputados del PRO, Cristian Ritondo; la familia Galmarini Durrieu y la Policía Federal Argentina, entre otros
Ayer, el cortejo fúnebre había arribado puntualmente a las 20 al Congreso de la Nación, donde fue recibido por la vicepresidenta y presidenta del Senado, Cristina Kirchner. Minutos después de las 21 arribó al velatorio el presidente Alberto Fernández, acompañado por la primera dama Fabiola Yañez, quienes saludaron a la familia del ex mandatario. Permanecieron alrededor de 10 minutos.
La despedida se inició con una ceremonia íntima de la que participaron la ex esposa de Menem, Zulema Yoma, su hija Zulemita, su hermano Eduardo y sus nietos, entre otros familiares.
Custodiado por granaderos, rodeado de varias ofrendas florales, una cruz y el símbolo islámico de la luna creciente y la estrella, el féretro fue cubierto con varias banderas argentinas y una camiseta de River, club del cual era hincha el expresidente.
Tras la ceremonia íntima, se permitió el ingreso de dirigentes, amigos y allegados; entre los que hubo dirigentes históricos del peronismo. Algunos de ellos, pudo reconstruir Infobae, fueron su primer ministro el ex presidente Eduardo Duhalde, el ex ministro de Justicia, León Arslanian; el exsenador por Entre Ríos, Héctor Maya; uno de sus principales asesores de política exterior, Jorge Castro; su exsecretario Ramón Hernández; su exsecretario de Defensa Interior del segundo mandato; su exsecretario de Defensa Interior, Miguel Ángel Toma; su exministro del Interior, Carlos Corach; el exgobernador bonaerense y actual embajador en Brasil, Daniel Scioli, y el auditor general de la Nación y expresidente del bloque del Frente para la Victoria, Miguel Ángel Pichetto; entre otros.
El velatorio continuó hasta después del mediodía, cuando se retiraron los restos para su inhumación en el cementerio Islámico de San Justo, donde está enterrado su hijo Carlos Menem Jr. “A pesar de que profesaba la religión católica va a estar en el Cementerio Islámico con mi hermano”, dijo Zulemita.
Ayer, el ingreso del público se habilitó pasadas las 21.20. Sus seguidores desfilaron frente al ataúd detrás de un cordón dispuesto en el Salón Azul, en un clima cálido y afectuoso tras haber esperado bajo una copiosa lluvia.
En tanto, un grupo de ciudadanos recibió en las puertas del Congreso el cortejo fúnebre, con un aplauso y la arenga de “Vamos, Menem”, una de las consignas de campaña del fallecido exmandatario.
“¡Viva Menem!”, gritaron otros a viva voz, repetidamente. Una mujer lloró mientras se aferraba a su marido. En tanto, sobre Rivadavia se formaba, ya en la oscuridad, una fila para entrar, donde muchos llevaban flores y banderas de la Argentina.
En el tramo final del velorio un grupo de gente empezó a cantar la marcha peronista. Las estrofas sonaron al compás de los aplausos y los dos señalando la V de la victoria, un clásico símbolo peronista. Fue un momento emotivo para los presentes y para la familia. El final de la despedida en el Congreso.
Si bien el tránsito fue cortado en la intersección de Entre Ríos y Avenida Rivadavia para el momento del ingreso del féretro, cuando un cordón policial reubicó a los peatones apostados en la calle, luego fue rápidamente restablecido, incluso en la propia Entre Ríos.
El senador riojano falleció este domingo a los 90 años. Venía atravesando complicaciones de salud: primero estuvo internado en el Instituto del Diagnóstico y Tratamiento a raíz de una neumonía bilateral y hace algunas semanas debió ser internado por una infección urinaria en esa clínica de Palermo, donde finalmente murió.
Fuente: Infobae.