Un sistema de reactivos, capaz de detectar específicamente la variante británica del coronavirus, fue desarrollado y registrado en Rusia, comunica el organismo sanitario ruso Rospotrebnadzor.
La tecnología, denominada ‘AmpliSens SARS-CoV-2-UK-IT’, ya ha pasado con éxito los ensayos clínicos, que confirmaron su alta precisión, resalta el organismo.
La cepa N501Y fue identificada por primera vez en diciembre pasado en la ciudad inglesa de Kent. La variante, que ha sido reportada en varios países, se caracteriza por una propagación más rápida que el virus original.
Este miércoles, los científicos británicos detectaron dos nuevas variantes de coronavirus. Una de ellas es calificada como «variante preocupante». Se trata de la cepa de Kent, que sufrió la mutación E484K. La otra fue registrada en Liverpool y designada como «variante bajo investigación». También tiene rastros de la mutación E484K.