El atentado contra un vehículo municipal, ocurrido este jueves en Villa Itatí, generó el repudio y la denuncia por este nuevo hecho de violencia que tiene como víctimas a empleados de la Ciudad. El incidente se produjo a media mañana en la esquina de calles Franklin y Julio Acosta, cuando un vehículo de la Unidad de Inspección Integral de la Dirección General de Bromatología fue blanco de varios disparos. No hubo heridos pero sí daños en el chasis del rodado.
Para Gustavo, este ataque podría estar relacionado a evitar la transparencia de las actividades comerciales debidamente habilitadas. “Lamentamos estos atentados que afectan la tranquilidad de los operarios de las distintas áreas de Inspecciones, quienes desarrollan sus tareas permanentes de control de la actividad comercial”, indicó.
“Tenemos protocolos de intervención, contamos con hojas de ruta para la fiscalización, se visitan los distintos comercios, industrias y, gracias a Dios, no hubo víctimas fatales en este incidente protagonizado por un motociclista, y a pesar de todo vamos a continuar con nuestro trabajo”, reflejó. Para el jefe comunal, “esta actitud de amedrentamiento tiene la intención de evitar que se continúe transparentando una situación de muchos años”.
“Existía hasta hace poco un circuito clandestino donde comerciantes abonaban recursos para algunos funcionarios de carrera, que contaban con su sistema de empadronamiento privado y cobraban para mantener a los comercios dentro de ese empadronamiento y sin realizar los controles pertinentes, pero intervenimos en ese caso y cambiamos esa situación”, agregó.
Martínez reconoció que el 95 por ciento del personal municipal es honesto, “aunque hubo algunos que sufrieron amenazas mafiosas, incluso a sus familias, pero no permitimos ni permitiremos que sucedan más estos hechos, por lo menos en esta gestión”.
“Sabemos que hay cosas que no son simpáticas, pero estamos del lado de los vecinos y vecinas, porque se trata de la salud, y también ratificamos nuestro apoyo al personal municipal, les vamos a garantizar su seguridad y esperamos que la Justicia actúe hasta las últimas consecuencias, tenemos que terminar con este circuito mafioso”, puntualizó.
EL INCIDENTE
Sobre este delicado asunto, el subsecretario de Regulación y Fiscalización de la Ciudad, Gustavo Amann, explicó: “Atacaron a un equipo de operarios de la Unidad de Inspección Integral, fueron víctimas de un hecho muy grave ya que estaban trasladándose en un vehículo municipal”.
Precisó que el episodio tuvo lugar cuando el rodado tipo furgón circulaba por detrás de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) donde los trabajadores escucharon varios estampidos, notando luego que fueron balazos que impactaron en la parte trasera y uno de los parantes, muy cerca del lugar ocupado por uno de ellos.
“De milagro no hubo heridos – continuó -, nuestro personal no hace más que cumplir su trabajo, desarrollan los controles bromatológicos porque es su labor y esto nos deja consternados”.
Amann informó que puso en conocimiento del hecho a Gustavo y que se presentó la correspondiente denuncia penal en la comisaría jurisdiccional.
“El chofer de nuestro vehículo alcanzó a ver a un motociclista tipo 110 cc que se dio a la fuga, veremos qué conducta tomaremos, ya que considero que fue un hecho dirigido al personal municipal”, consideró el funcionario, relacionado a que la última intervención antes del atentado fue en un comercio de avenida Castelli al 1.800, donde se decomisaron mercaderías y se labró un acta de contravención.
“Hay algunos contribuyentes que reaccionan mal, pero no son todos. Gracias a Dios no hubo lesionados, pero queremos advertir que la Ciudad seguirá con los controles porque queremos que Resistencia se ordene desde el punto de vista comercial. Este tipo de acto violento no es común, pero hay personas que tienen la intención de bloquearnos”, aseveró.