En el segundo Día del Trabajador en contexto de pandemia, TN24 dialogó con Silvia Colman médica terapista del hospital Pediátrico para entender como se lleva a cabo una profesión donde se esta «en la primera línea de trabajo», como ella misma lo definió. «Conmemorando el Día del Trabajador, desde mi lugar no puedo dejar de agradecer a la vida y a Dios por el trabajo que tengo y por hacer lo que me gusta y amo. Se que no todos pueden decir lo mismo pero esta bueno vivir de lo que a uno le gusta. Por otro lado en honor a los mártires de Chicago, me gustaría pedirles a los trabajadores de la salud que no bajemos los brazos, porque debemos seguir luchando», afirmó Colman en primera instancia.
A su vez, añadió, «trabajar en salud, es un arte bastante difícil pero se realiza de manera tan organizada e interdisciplinaria, por eso valoro a cada uno de los que son artífices de la salud formando grandes equipos de trabajo. Por eso los incitó a que sigamos poniéndole garra, fuerza y que continuemos defendiendo la camiseta de la salud como siempre lo hacemos, con toda la pasión de siempre. Y hoy más que nunca seguir luchando por un sueldo digno, tampoco parar este reclamo pese a lo cansado que estamos tras un primer año de pandemia e incluso viendo que nos queda un rato largo todavía. Pero debemos seguir luchando por nuestros derechos, como lo hicieron en su momento los trabajadores en aquella reivindicación porque el esfuerzo que ponemos en esto es inmenso, le ponemos mucha fuerza y lo hacemos siempre de la mejor manera luchando en pos de la vida».
TRABAJADORES ESENCIALES
Colman remarcó que pese al orgullo que siente al ser médica, es necesario que el sueldo de los trabajadores de salud valga todo el esfuerzo que depara ser profesional, «ser médica me representa un orgullo inmenso, porque lo cierto es que los trabajadores de la salud estamos más que nunca en la primer línea de la batalla y por eso pedimos que el mejor reconocimiento para nosotros seria que nos recompensen con salarios dignos. En este 1 de mayo se debe reivindicar que si somos realmente esenciales. Porque los aplausos nos hacen bien al alma, pero también necesitamos que nuestro sueldo valga».
AMAR LA PROFESION
Por último, la médica del Pediátrico comentó, «si me preguntan si me arrepiento de haber elegido ser médica diría que nunca jamás, siempre volvería a elegir mi carrera. Pero la realidad es que estamos muy mal pagos y por esto es que nos movilizamos y buscamos hacer valer tanto estudio, esfuerzo y pasión por medio de una recomposición salarial acorde a estos tiempos, ya que nuestro sueldos han quedado en la prehistoria», finalizó.