Muchas eran las expectativas puestas en Assassin’s Creed, la película de 2016 protagonizada por Michael Fassbender, que buscaba romper con esa mirada catastrófica que hay respecto a las adaptaciones de videojuegos al cine. Pero no solo no pudo lograrlo, sino que agrandó este abismo de alguna forma. Y donde nadie tenía esperanzas, Netflix quiso meter sus manos que convierten en oro a todo lo que tocan. O bueno, a casi todo.
La idea de la N roja es hacer una serie live-action con el guionista Jeb Stuart, el mismo que escribió éxitos como Die Hard, Lock Up, Another 48 Hrs o The Fugitive. Según Variety, todo esto forma parte de un acuerdo entre partes que podría llevar a futuras adaptaciones animadas para el servicio de streaming. Por su parte, Ubisoft Montreal ya produjo dos cortometrajes de animación basados en el juego.
Assassin’s Creed tuvo su primer acercamiento a los conceptos cinematográficos en un corto de tres partes que vio la luz en YouTube en 2009. Más tarde, en 2016 se realizó una adaptación cinematográfica, donde Fassbender interpretó el doble papel de Cal Lynch y su astuto ancestro asesino, Aguilar de Nerha. La película fue un completo fracaso de crítica y todos asumimos que la oportunidad de que el videojuego vuelva a la pantalla grande era definitivamente imposible.
Pero claro, no contábamos con Netflix y su afán de producir y generar más contenido de lo que le dan las manos. Desde hace un tiempo, adapta cómics, novelas gráficas, novelas en general y, por qué no, videojuegos, como es el caso de Resident Evil, serie de la que pudimos ver un avance hace pocos días atrás. Desde acá, les avisamos que nos gustaría que hagan varias temporadas, cada una centrada en un juego diferente y, por ende, en una época histórica diferente.
Fuente: Cultura Geek
