La provincia que gobierna Gustavo Valdés continúa encabezando las duras estadísticas de desempleo y desocupación en la región del NEA, ya que nada cambió desde los indicadores oficiales del INDEC emitidos el mes pasado. Pero en el sector sanitario también se encienden las alarmas luego de los reclamos de personal de salud por la regularización de sus puestos de trabajo y las desbordadas jornadas de vacunación en los últimos días.
El dirigente radical, que va por la reelección en las próximas elecciones, está en plena campaña pero no se lo escuchó hablar sobre nueva generación de empleo ni tampoco desarrollo económico para la provincia. Al menos en sus últimas apariciones en público no se refirió a los datos que exponen una situación muy complicada en dos pilares de la sociedad: el trabajo y la Salud.
Si bien el Gobierno provincial comunica diariamente sobre cronogramas de vacunación y turnos, la realidad golpeó al relato ayer con postas llenas de ciudadanos que terminaron expuestos al frío y a contagios debido a una organización que falló notablemente.
Lo sucedido en el Hospital Llano y en el Club Juventus no es lo único que preocupa en territorio correntino, y para muestra de ello se puede mencionar el reclamo hecho días atrás por parte de trabajadores de la Salud para que el Ejecutivo regularice la situación de cientos de colegiados que siguen sin obra social ni seguro de vida.
Tampoco se informó de manera oficial alguna respuesta a la necesidad de insumos y personal en las guardias en distintos centros de salud y hospitales de la provincia, lo que acentúa el complejo escenario que padecen muchos correntinos.
Finalmente, sobre los indicadores de desocupación, estos no bajaron del 9,9% y tampoco se vio un repunte en la búsqueda de trabajo, ya que no sobran ofertas laborales y el riesgo de contraer COVID-19 por la pandemia dificulta aún más el panorama de quienes no tienen una fuente de ingreso.