El heroico hecho sucedió anoche en la localidad de Ingeniero Babert donde una madre, en su desesperación fue con su hijo de dos años hasta la casa de un conocido policía de la zona (se encontraba de franco) debido a que el menor tenía obstruida la garganta por un trozo de comida y respiraba con mucha dificultad.
De inmediato el sargento José Villanueva tomó al pequeño y le realizó la conocida maniobra Heimlich, con la cual logró salvar al infante que arrojó un pequeño pedazo de salchicha y comenzó a respirar con normalidad.
Pese a esto, Villanueva acompañó a la madre y al niño hasta el hospital de Colonia Elisa, donde revisaron al infante y confirmaron que se encontraba en buen estado de salud.