El impacto de la pandemia en la economía argentina fue tan relevante que, pasado más de un año y medio del comienzo de la crisis sanitaria, la actividad económica todavía se encuentra por debajo del nivel que tenía en febrero de 2020, justo antes de la irrupción del COVID-19 que llevó a decretar la cuarentena el 20 de marzo de ese año. Desde ese piso que tocó en el segundo trimestre 2020 comenzó un camino de recuperación, pero que en comparación con los países de la región es mucho más acotado.
A diferencia de otras economías de América Latina, la Argentina ya arrastraba, antes de llegar a la situación de crisis pandémica una recesión desde mediados de 2018, que derivaron en devaluaciones sucesivas, aceleraciones en la inflación, caída del PBI y una suba del desempleo y la pobreza. De todas formas, hacia adelante, según estiman organismos internacionales, la Argentina todavía tendría un escenario de recuperación más lento que sus vecinos.
El atraso que acumula el repunte de la economía local se puede ver en un informe oficial hecho por el Ministerio de Desarrollo Productivo, que a través del Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI), mide en distintos trabajos el desempeño comparado con las economías del continente.
Desde el piso que tocó en los primeros meses de cuarentena la economía argentina comenzó un camino de recuperación, pero que en comparación con la región a un ritmo más acotado.
En su última entrega, los datos del CEP XXI -que toma como referencia información oficial de cada país- remarcó, en ese sentido, que la economía argentina estaba hacia julio aún 0,8% por detrás del nivel de actividad que registraba en febrero de 2020. El último dato oficial (estimador mensual de actividad de agosto) no alcanzó a ser tomado en cuenta para la elaboración de ese informe. Con ese dato, según cálculos oficiales, la economía quedaría un 0,3% por encima de la prepandemia.
En relación con el grupo de países que toma en cuenta el relevamiento oficial -algunos no son considerados ya que sus gobiernos no tienen información mensual de la actividad económica-, la Argentina se ubicaría en la parte baja de la tabla de posiciones, solo El Salvador (-2,5%), Canadá (-1,9%) y México (-1,2%) tienen cifras peores.
“Los países del continente americano continúan recuperándose y la mayoría de ellos se encuentra operando en niveles de prepandemia. Gran parte de la región anotó subas mensuales desestacionalizadas en julio, aunque a ritmos dispares: casi la totalidad de las naciones que retrocedió en el comparativo mensual de junio se recuperó en el mes precedente, mientras que el resto moderó su alza (con la excepción de Guatemala que lo acentuó) y solo un pequeño grupo de países (Paraguay, Perú y Canadá) registró caídas”, indicó el informe oficial.
Los últimos datos oficiales de crecimiento económico que tomó en cuenta el relevamiento oficial -los de julio- marcaron que la economía argentina recortó su brecha respecto a la prepandemia. Un mes atrás era de 2,2% y pasó a 0,8%, según el informe, por lo que es menor a la de México y Canadá, mayor a la de Chile y Ecuador y similar a la de Perú.
“Si se compara con los niveles de 2019, gran parte del continente sostuvo las tasas de crecimiento (todos aumentaron en el comparativo interanual). Las mayores alzas se concentraron en Sudamérica con desempeños destacados en Chile, Ecuador, Colombia y Paraguay; le sigue todo Centro América (con la excepción de la economía de El Salvador, que cayó) con Guatemala como el país de mayor crecimiento del continente”, muestra el trabajo del Ministerio de Desarrollo Productivo.
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Fuente: Infobae.