«Si lo hiciéramos, acabaríamos con algo que terminaría en una guerra total en Europa y que involucraría a muchos más países, generando más sufrimiento», argumentó el secretario general de la organización.
La OTAN rechazó la posibilidad de crear una zona de exclusión aérea en Ucrania, lo que podría demandar el uso de aviones de combate de esa organización, en el marco del conflicto armado entre ese país europeo y Rusia.
Autoridades de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) explicaron que esa agrupación no es parte de la contienda bélica en Ucrania y debe asegurarse que no se extienda al resto de Europa y sus naciones aliadas.
Por ese motivo, no creará una zona de exclusión aérea en Ucrania que requiera el uso de aviones de combate de la OTAN para hacer frente a la invasión rusa.
Así lo explicó el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en una conferencia de prensa tras una reunión especial de los ministros de Defensa de la organización, celebrada apenas horas después de que tropas rusas supuestamente atacaran la central nuclear de Zaporiyia en Ucrania.
«Hemos dejado en claro que no vamos a entrar en Ucrania ni por tierra ni por los espacios aéreos ucranianos. Y, por supuesto, la única forma de implementar una zona de exclusión aérea es enviar aviones de la OTAN, aviones de combate al espacio aéreo ucraniano. Y luego imponer esa zona de exclusión aérea derribando aviones rusos», sostuvo Stoltenberg.
«Nuestro análisis es que entendemos la desesperación, pero también creemos que si lo hiciéramos, acabaríamos con algo que terminaría en una guerra total en Europa, que involucraría a muchos más países y generando más sufrimiento», agregó el funcionario de origen noruego.
Además, dijo que la OTAN planea seguir apoyando a Georgia y a Bosnia-Herzegovina, dado que la organización entiende que ambas naciones podrían ser el próximo objetivo del presidente ruso, Vladimir Putin.
En momentos en los que la guerra en Ucrania se acercó en forma peligrosa a la central nuclear más grande de Europa, la OTAN pidió al líder del Kremlin que detenga la ofensiva armada en su vecino país y retome la vía diplomática.
«Somos una organización defensiva, pero si hay un ataque estamos preparados», aseguró, por su parte, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
En tanto, la ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Mélanie Joly, sostuvo que existe «una parte de irracionalidad en Putin» y añadió: «Tenemos que tener esto en cuenta al abordar la situación».
Este viernes también, la Comisión Europea suspendió de manera inmediata su cooperación con Rusia y Bielorrusia y anunció nuevas sanciones, mientras continúa en estudio la solicitud de adhesión de Ucrania a la Unión Europea.