Pese a no contar con las denuncias, los agentes de las unidades policiales iniciaron las pesquisas y rastrillajes que permitieron esclarecer dos ilícitos. Un hombre de 34 años fue aprehendido por uno de los hechos.
Una iglesia y una vecina del barrio Jorge Newbery fueron los damnificados y que por el accionar policial, los elementos fueron devueltos a sus propietarios.
Ambos ilícitos no habían sido denunciados y los agentes actuaron de oficio para esclarecerlos.
Un parlante que fue sustraído de una parroquia local, fue incautado en poder de un ciudadano de 30 años, quien lo habría comprado de buena fe, según sus dichos.
El presunto vendedor fue detenido y llevado a la comisaria local, donde quedo alojado.
Mediante, información precisa horas después, llegaron a la casa de una mujer de 43 años, quien hizo entrega de una tv de 29 pulgadas, una puerta placa y varias alhajas, que su hijo habría hurtado desde una vivienda del barrio Jorge Newbery.
En un tercer caso el personal de guardia de la Comisaría Primera, en el barrio Gendarmería incautó un televisor 43 pulgadas que estaba abandonado en calle Avellaneda, se investiga si fue obtenido de forma ilícita.
Todos los bienes fueron regresados a sus propietarios y resta atrapar al presunto ladrón del barrio Newbery. Los damnificados fueron invitados a radicar las denuncias.