La OTAN y la Organización del Tratado del Atlántico Norte se describen como una alianza de defensa europea y norteamericana no agresiva.
Este organismo se creó con el objetivo de promover la paz y la estabilidad y salvaguardar la seguridad de cada uno de sus miembros. La sede se encuentra en Bruselas, y nació a medida que se intensificó la Guerra Fría.
Durante dicho periodo, su objetivo era proteger a los países de Europa Occidental de la amenaza que suponía la Unión Soviética.
Al mismo tiempo, querían contrarrestar la expansión del comunismo luego de la Segunda Guerra Mundial. Fueron 12 los miembros fundadores los cuales firmaron el Tratado del Atlántico Norte y se comprometieron a protegerse mutuamente por medios tanto políticos como militares.
Actualmente, esta organización tiene muchos más miembros, incluso tres antiguas repúblicas soviéticas. Dicho esto, Rusia sigue pensando que la OTAN es una gran amenaza, incluso luego del colapso de la Unión Soviética.
Esto es algo que ha quedado claro en repetidas ocasiones cuando Rusia pidió garantías firmes de que la alianza no se expandirá más, algo a lo que los miembros de la OTAN se han resistido.
Muchos cambios geopolíticos han ocurrido con el paso de los años, pero el rogativo de la OTAN se mantiene, estando su principio clave basado en la defensa colectiva. Un ataque armado contra un equipo miembro o varios de ellos en Europa y América del Norte, llevará una respuesta en represalia.
Un ejemplo claro de este principio se encuentra en el artículo 5° del Tratado del Atlántico Norte. En dicho artículo, se garantiza que, los recursos de toda la alianza, pueden ser usados para proteger a cualquier nación miembro. Este hecho es sin duda crucial para muchos de los países pequeños ya que estarían indefensos sin sus aliados.
El gobierno de los Estados Unidos es el miembro más grande y poderoso que tiene la OTAN, lo que quiere decir que cualquier miembro de esta Alianza está bajo la protección de dicho país.
Ahora es importante señalar que la primera y una vez que se invocó el artículo 5 fue luego de los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra Estados Unidos. Resultado de esto los aliados de la OTAN se unieron a la invasión de Afganistán.
Aunque también ha actuado en otros casos, por ejemplo, en 1991 puso en marcha medidas de defensa colectiva cuando desplegó misiles Patriot durante la Guerra del Golfo. Por otro lado, en 2003 durante la crisis de Iraq y en 2012 en respuesta a las situaciones en Siria también actuó. En ambos casos fueron peticiones de Turquía.
Dicho esto, hay que aclarar que la OTAN no tiene su propio ejército, sino que depende de la aportación de fuerzas de sus países miembros. Es tan fuerte como las fuerzas individuales de cada nación. Para toda la coalición es de sumo interés que cada país dedique suficientes recursos a su defensa.
Para Estados Unidos y Reino Unido este punto en particular ha generado fricción, ya que a menudo critican a otros Estados miembros por no aportar su parte justa. En el caso de Estados Unidos su gasto militar siempre ha sido por mucho superior al presupuesto de los demás aliados desde inicios de la fundación.
De acuerdo con las directrices de la OTAN cada país tiene que gastar el 2% de su PIB en defensa, no obstante, la mayoría de los países no alcanzan dicho objetivo. En el 2014 solo Estados Unidos, Reino Unido y Grecia gastaron más del 2%. Esto tuvo una mejoría luego de que siete de los estados miembros de la alianza alcanzarán el objetivo del 2%.
Todos los países miembros que se encontraban por debajo del umbral se comprometieron a aumentar el gasto militar para alcanzar el objetivo de una década. Afortunadamente la mayoría está cumpliendo su promesa.
Ahora las labores de la OTAN han evolucionado y ampliado después de la caída de la Unión Soviética.
Desde este punto los estados miembros han trabajado como fuerza de paz en Bosnia, luchan contra el tráfico de personas y han desplegado para interceptar a los refugiados en el mediterráneo. Además, la alianza trabaja en responder a las nuevas formas que se pueden desarrollar los conflictos con un centro de ciberdefensa en Estonia.