El exsenador de la Nación, Eduardo Aguilar, quien ya anunció sus intenciones de ir por la intendencia de Resistencia, es uno de los dirigentes políticos más críticos de la gestión de Gustavo Martínez, y concretó al pasado 3 de junio la presentación de pedido de informe ante el Insssep sobre la presunta deuda contraída por el ahora el cuestionado intendente de la capital chaqueña en su paso por la empresa estatal Sameep.
Se trataría de una cifra millonaria que Martínez descontó a los trabajadores de Sameep entre 2008 y 2015 para los aportes jubilatorios, pero no fueron transferidos a la obra social. Según detalló Aguilar, la deuda asciende a un total de $2.000 millones, equivalentes a $7.000 millones de hoy. «Basta de corrupción e impunidad del intendente de Resistencia. Hay que limpiar la política del Chaco de este personaje», manifestaba el ex senador días atrás en sus redes sociales.
«En la denuncia contra Martínez el delito ya está probado: hubo malversación de fondos, dinero retenido a los trabajadores que no se depositó al Insssep y se usó para otra cosa. Tanto que después hubo que hacer un convenio para compensar deudas. Esos son seis años de prisión e inhabilitación para ejercer cargos públicos. Las pruebas están asentadas en todos los libros contables», detalló Aguilar.
Ya presentada la nota de pedido de informe al Insssep y habiendo tomado trascendencia pública del caso, Aguilar contó que recibió el llamado de varios abogados «de renombre» para ayudarlo a armar la denuncia «pero sin firmarla ellos, por temor a represalias».
Asimismo, dijo haber sido advertido por la existencia de fuertes vínculos de Gustavo Martínez con la Justicia. «Ojo que el fiscal fulano responde a Martínez, ojo que el juez sultano responde a Martínez, ojo que en el Tribunal, perengano responde a él…Más tentáculos que pulpo malabarista. Pero no veo que vaya a zafar de este delito tan evidente», señaló Aguilar en sus redes sociales.
