El Ministerio de Seguridad y Justicia del Chaco difundió detalles de compras realizadas en las últimas semanas para el Servicio Penitenciario y de Readaptación Social de la Provincia. Se trata de elementos necesarios para el correcto desarrollo de la labor de todas las unidades de la fuerza, y demandaron una importante inversión por parte del Gobierno provincial.
El objetivo de estas acciones es garantizar mejores condiciones de seguridad, habitabilidad, y espacios aptos para el cumplimiento de las condenas de los internos, y mejores condiciones de trabajo para el personal del servicio.
La compra incluyó elementos que hacen al mantenimiento de la infraestructura de las unidades: 45 artículos de electricidad, taladros, soldadoras, amoladoras, entre otros, los cuales permitirán preservar y fortalecer la seguridad externa y perimetral.
Por otro lado, la fuerza fue provista de 145 colchones ignífugos, 1220 frazadas, 200 sillas, 40 mesas, para distribuir en las diferentes locaciones de la provincia. Asimismo, 10 heladeras, 20 freezers, 12 hornos y 24 anafes, 43 equipos informáticos, maquinaria industrial para las secciones de sastrería y panadería, para continuar promoviendo la reinserción laboral de los internos.
Además, se adquirieron nuevas armas, linternas, candados y elementos de seguridad para el personal penitenciario, que de igual forma serán asignadas a distintas unidades y divisiones del Servicio Penitenciario Provincial.
Nuevo ciclo de formación en el complejo penitenciario N°1
Paralelamente, la ministra de Seguridad y Justicia, Gloria Zalazar y el ministro de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología, Aldo Lineras, presentaron la Tecnicatura Superior en Prevención de Adicciones y Violencias en Contexto de Encierro, que se realizará en el Complejo Penitenciario n° 1 de Resistencia.
Según lo estipula un convenio de colaboración, la UEP N°157 «Foro Social del NEA» brindará formación en la órbita del Servicio Penitenciario Provincial. Es por eso que también se entregaron 36 tablets para jóvenes que participarán de la capacitación en contexto de encierro, a fin de garantizar la educación para el personal penitenciario y las personas privadas de su libertad.