El Gobierno nacional está analizando «paso a paso» las medidas económicas a seguir. En un contexto de escasez de reservas y tras las nuevas medidas cambiarias, lo que queda por delante es un plan de estabilización elaborado por Sergio Massa y el Secretario de Programación Económica, Gabriel Rubinstein. En qué consistirá.
Según anticiparon fuentes oficiales, podría implementarse en noviembre. Incluiría un acuerdo formalizado de precios y salarios que baje drásticamente la escalada de precios por cuatro meses.
En una reunión que se dio esta semana, de la que participaron varias de las empresas más importantes del país, se dialogó sobre la puesta en marcha de un plan de estabilización. Según fuentes que presenciaron el encuentro, los directivos que tuvieron contacto con Massa coincidieron en que la iniciativa se aceleró. En el Ministerio de Economía no dan nada por cerrado, pero apuntan a noviembre como una fecha posible.
La próxima etapa del plan estaría apuntada hacía el componente inercial de la inflación. Luego de acomodar algunos precios relativos, la idea sería “parar la pelota por cuatro meses”. Es decir, un acuerdo de precios y salarios, que podría incluir también un sendero claro para el dólar y las tarifas que permita desindexar la economía y ponerle un freno a las remarcaciones preventivas.
El director General de Syngenta Antonio Aracre (que anunció que a fin de año dejará el cargo), uno de los CEOs con mayor llegada a la Casa Rosada, viene insistiendo desde hace tiempo en la necesidad de aplicar un “torniquete anti inflacionario” para frenar la inercia.
El empresario acercó esta idea al presidente Alberto Fernández y en su momento también al ministro Martín Guzmán. Según Aracre, el “torniquete” permitiría “volver a una inflación del 30% más compatible con las dificultades macroeconómicas”.
En concreto, consiste en el reacomodo de precios relativos que puedan estar desfasados: dólar, tarifas y salarios. Luego de eso plantea confluir a un congelamiento.
Fuente: Ámbito.-