Elon Musk, dueño de Tesla y de SpaceX, tomó este jueves el control de la red social Twitter tras concluir su compra por 44.000 millones de dólares, según varios artículos de la prensa especializada estadounidense.
Después de meses de una serie de idas y venidas, el hombre más rico del mundo echó con efecto inmediato al director ejecutivo de la compañía, Parag Agrawal, y a otros dos altos ejecutivos, según indicó The Washington Post.
El desplazamiento del director ejecutivo de la compañía ocurre después de las acusaciones que había lanzado Musk cuando había insinuado que iba a retirar su oferta de compra.
Además de Agrawal, fueron expulsados el director financiero, Ned Segal, y el jefe de políticas y asuntos legales, Vijaya Gadde, según fuentes citadas por la agencia Reuters.
El hombre más rico del mundo aseguró que los tres ejecutivos lo habían engañado a él y a los inversores de Twitter sobre la cantidad de cuentas falsas en la plataforma de redes sociales.
Según la prensa estadounidense, Agrawal y Segal se encontraban en la sede de Twitter, en San Francisco, cuando se cerró la operación de compra. El presidente ejecutivo y el director financiero fueron escoltados hacia afuera, agregaron las fuentes.
La compañía no ofreció respuestas a las consultas que distintos medios y agencias le realizaron respecto a lo sucedido. Tampoco lo hicieron Musk y los ejecutivos expulsados.
La operación de 44 mil millones de dólares cierra una etapa que había tenido varios traspiés en el último tiempo. Musk tenía hasta el viernes para cerrar la compra de la red social, de lo contrario se habría celebrado un juicio en noviembre.
“Chief Twit”
El magnate había publicado el miércoles en la red social, de la que ahora se adueñó, un video en el que se lo ve ingresando en las oficinas de Twitter junto a un lavabo.
Además, el multimillonario también cambió su descripción de perfil en Twitter a “Chief Twit”, y consignó como su ubicación a las oficinas centrales de la red social, ubicadas en San Francisco. Se trata, además, de una ironía ya que “twit” quiere decir “cretino” en inglés.
El multimillonario -que también sueña con enviar la primera misión tripulada a Marte- publicó un mensaje este jueves en Twitter en la que señala los motivos que lo llevaron a concretar la compra de la red social.
“La razón por la que adquirí Twitter es porque es importante para el futuro de la civilización tener una plaza digital común, donde una amplia gama de creencias pueda ser debatidas de una manera saludable, sin recurrir a la violencia”, expresó.
“No lo hice porque sería fácil. No lo hice para hacer más dinero. Lo hice para intentar ayudar a la humanidad, a la que amo”, agregó luego.
Moderación de contenidos
Musk trató de tranquilizar a los anunciantes al asegurar el jueves que quiere permitir las expresiones de todas las opiniones en la red social, sin hacer de ella una plataforma “infernal” en la que todo estará permitido”.
Autocalificado como adalid de la libertad de expresión, el empresario ha indicado que evalúa flexibilizar la moderación de contenidos, una política que alimenta los temores sobre un aumento de abusos y desinformación en la plataforma.
La idea, según la prensa norteamericana, puede abrir la puerta a un regreso del expresidente de Estados Unidos Donald Trump, vetado de la red social tras el asalto al Capitolio ocurrido el 6 de junio 2021.
La iniciativa, sin embargo, causa rechazo entre ciertos anunciantes que suelen preferir ver asociadas sus publicidades a contenidos moderados. Se trata de una preocupación que también comparte la clase política estadounidense. Se teme que el exmandatario utilice la red social como un megáfono.
A su vez, se teme que la nueva política de contenidos afecta la integridad de la plataforma, o que intente favorecer a sus negocios. Musk es dueño de Tesla, que produce automóviles eléctricos, y de SpaceX, una de las compañías involucradas en la nueva carrera espacial.
Musk dijo que Twitter adherirá a las “leyes de la nación”, y que la plataforma debe ser “cálida y acogedora” y permitir a los usuarios que elijan la experiencia que desean tener, tal como se elige qué película ver o que videojuegos jugar. Musk prometió además que los avisos serán “tan relevantes como sea posible” para las necesidades de los consumidores.
“Fundalmente, Twitter aspira a ser la plataforma de publicidad más respetada en el mundo que fortalezca sus marcas y haga crecer sus negocios”, les dijo a los anunciantes.
En términos comerciales, el empresario sostiene que es esencial para la empresa mostrar publicidades que correspondan a las “necesidades” de los internautas.
Cruces
La operación de compra se alargaba desde que lanzó una oferta de compra por 44.000 millones de dólares a finales de abril, que Twitter aceptó a regañadientes.
El multimillonario trató luego de revertir el acuerdo de manera unilateral a principios de julio, acusando a la empresa de haberle mentido, pero el consejo de administración de la red social llevó el asunto ante los tribunales.
No obstante, las señales de que la operación estaba finalmente en curso se multiplicaron a lo largo de la semana.