Gustavo Martínez, intendente de Resistencia, tiene fuerte ascendencia en la Cámara de Diputados del Chaco. Tan es así que su pareja, Elida Cuesta, es quien preside la Legislatura y gobierna, parece ser, de acuerdo a la conveniencia del intendente de la capital chaqueña.
Días atrás, Cuesta y el bloque del CER, presentaron un proyecto de ley a través del cual se propone suspender las PASO por un año. Esto abriría para su espacio negociaciones directas con Capitanich, que es quien hoy tiene el poder real, teniendo en cuenta que Martínez tiene una imagen por el piso de su gestión, y donde no aparecen en el futuro inmediato acciones que hagan pensar que esto se puede revertir.
Valiéndose en el gasto que las elecciones presentan (Nada se dice de los costosos espectáculos que se realizan en espacios públicos de la ciudad, y donde se desconocen los gastos y de donde sale el dinero), el intendente asegura que no son necesarias las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias.
Esta herramienta, que Néstor Kirchner en su momento y el peronismo posteriormente, calificó como una de las más importantes de la democracia, hoy parece no ser importante para las mismas personas que se hicieron eco de esta afirmación, entre ellas, Gustavo Martínez.
Es entonces que surge la pregunta ¿Qué hay realmente atrás?
Cuesta encontrar una respuesta concreta a esto, por lo que es válido conjeturar (como todo en política). Así, es dable suponer que la realización de las PASO mostraría al inmensa brecha que existe entre Capitanich y Martínez (que dijo quiere ser gobernador), por lo que le permitirá a «Gustavito» negociar lugares en listas y ministerios para su espacio, sin tener que exponerse en las urnas.
Habrá que esperar a ver que sucede. Lo concreto es que las PASO están cerca de desaparecer, marcando un claro retroceso en la ley electoral provincial.