Nadie atendía en la vivienda ubicada en el barrio La Liguria. La fiscalía dispuso que el personal ingrese y resguarde al niño.
El hecho ocurrió este miércoles, cuando alrededor de las 13 el personal del 911 recibió una llamada pidiendo ayuda: un bebé de dos años estaba encerrado en su casa, solo y llorando hace varios minutos.
Apenas supieron que el pequeño estaba en la calle Calandría al 3700 aproximadamente, del barrio La Liguria, dieron aviso a la móvil más cercano y no pasaron diez minutos que el personal de la Tercera llegó.
Luego de constatar la situación, golpearon varias veces la puerta, revisaron los distintos accesos al lugar y como no fueron atendidos por nadie dieron aviso a la fiscalía.
Finalmente, por orden judicial y con intervención de la Línea 102, ingresaron a la vivienda en presencia de testigos y entregaron al bebé a su tía. Ambos fueron trasladados a la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia.