«Eli sabe lo que falta». Ese es el slogan con el que Elida Cuesta busca ser la sucesora de su esposo, en lo que se considera la peor gestión municipal de la historia de Resistencia. Con millones de pesos gastados en publicidad, la pareja de Gustavo Martínez inundó la ciudad con su promoción de cara a los comicios del próximo 5 de noviembre. Realmente es admirable la moral de la candidata del CER, que considera posible imponerse en las urnas, aunque los millones invertidos no logran revertir su mala imagen en la sociedad.
Dentro de las pésimas acciones ejecutadas por Martínez, Cuesta -en caso de darse el milagro de una victoria- deberá hacerse cargo de la inconclusa obra de la Laguna Argüello, donde al igual que ella en publicidad, gastó el intendente para no se sabe muy bien que, teniendo en cuenta que hoy ese espacio verde está peor que cuando empezó a ser intervenido.
Videos de lectores dan cuenta y expresan la preocupación por el estado de abandono total de la histórica Laguna Argüello, e incluso es uno de los principales pedidos que le realizan a los demás candidatos.
Tal vez el próximo intendente debería conversar con Cuesta para que le dé indicios de qué falta para solucionar esta problemática que aqueja a miles de vecinos. Aunque teniendo en cuenta lo que fue la gestión del CER en Resistencia, parece ser solo un slogan de campaña y no algo veraz.
