En una declaración emitida ayer por los directivos de la Empresa Romero S.A. (ERSA), se confirmó la decisión de continuar con la prestación del servicio de transporte de pasajeros en la provincia de Corrientes. La compañía informó que, tras ser convocados por el Gobierno provincial y municipal, se llevaron a cabo conversaciones para «reformular las condiciones económicas y financieras del sistema de transporte público».
La nota corporativa, firmada por el presidente de Ersa, Juan Carlos Romero, destacó los esfuerzos conjuntos de todas las partes involucradas para asegurar la continuidad de un servicio de calidad para los habitantes de Corrientes. «Confiamos en que el Gobierno de la Provincia y el de la Municipalidad generen las políticas y los aportes necesarios para dotar a la actividad de las imprescindibles condiciones de sustentabilidad. El deseo de Ersa es brindar a los usuarios un servicio de calidad, seguro y eficiente», expresaron los directivos.
El conflicto que surgió en diciembre, motivado por demandas salariales de los choferes, parece encaminarse hacia una solución, aunque los problemas estructurales en el sistema de transporte del interior persisten desde hace décadas.
A nivel nacional, la situación no muestra signos alentadores, ya que aún no se vislumbra una solución de fondo para el sistema de transporte. En Corrientes, donde el conflicto ha sido objeto de diálogo y entendimiento entre las partes, la situación sigue siendo desafiante. El sistema de transporte de Ersa en Corrientes emplea a más de 1.000 correntinos y brinda servicio a más de 120.000 usuarios, lo que resalta la importancia de encontrar soluciones sostenibles para garantizar la continuidad de esta vital función en la provincia.