Autoridades de la fuerza de seguridad provincial reiteraron las normativas internas que establecen parámetros correspondientes a tatuajes o lo que se denomina arte en la piel o sobre la misma. No se recomiendan en el rostro o partes del cuerpo que puedan ser visibles al público con indumentaria de verano.
Cabe mencionar que el comunicado de la Policía del Chaco se da en el marco del nuevo ingreso de agentes y a pocos días de la salida de Ariel Acuña, jefe del cuerpo, quien será reemplazo por Fernando Romero el 9 de diciembre con la asunción de Leandro Zdero a la Gobernación de la Provincia.
En ese sentido, la directriz policial dice que no se puede integrar las filas policiales con tatuajes en partes como antebrazos, cuello, rostro u otras zonas que puedan ser visibles al público con ropa, por ejemplo, de verano.
También dispone que, en caso de tenerlos, los uniformados deberán borrarlos en un lapso de 60 días, aunque esto podría ser ambiguo luego de las declaraciones de Fernando Romero a la prensa en las últimas horas.
Según Romero, quien se hará cargo de la fuerza en los próximos días, los tatuajes no están prohibidos. Si bien es cierto que para ingresar no se puede tener tatuajes, una vez egresados los nuevos policías comienzan a tatuarse y es algo difícil de controlar.
Por eso pidió, por un lado, sentido común para entender que borrar un tatuaje es un proceso que puede llevar tiempo y riesgos de salud con licencias de por medio. Por el otro, recomendó que los uniformados usen camisas mangas largas y eviten los tatuajes en el rostro, porque «el policía tiene que mostrar la mejor imagen».
