El Ministerio de Seguridad de la Provincia de Santa Fe confirmó que los internos usarán uniformes bajo el argumento de la aplicación de «nuevos protocolos para desactivar el narcotráfico».
Desde la cartera de seguridad explicaron que esta medida facilitará la identificación y la supervisión de la custodia en los distintos pabellones, lo que ayudará a la contabilización y permitirá la detección de situaciones extrañas o inusuales.
En principio se utilizaría durante la visita que reciban internos, así como también en los espacios comunes y en la salida extramuros. Además, indicaron que los presos de altos perfiles serían los primeros en usarlos con la idea de implementarlo en todo el sistema penitenciario provincial.
Ante las críticas recibidas desde distintos sectores, políticos, sociales y de defensa de los derechos humanos, el Ministerio de Seguridad santafesino aseguró que esta incorporación no será para estigmatizar a los internos, si no para una «correcta visualización» de los mismos.
Esta medida se suma a las diversas restituciones que hay en las cárceles de Santa Fe y las relocalizaciones de presos por narcotráfico y homicidios.
«Ahora de los 9.000 presos que hay, vamos a empezar por distintas categorías. El uniforme te sirve para establecer a dónde va cada preso dentro de la dinámica carcelaria; el que puede pasar esa puerta para ir a un taller, para ir a una escuela; uno tiene que poder visualizarlo», dijo el ministro de Seguridad Pablo Cococcioni a La Capital.