Los negocios bursátiles de Argentina mostraban este martes una renovada subida, ante coberturas selectivas de fondos de inversión, en medio de dudas económicas y políticas que jaquean la flamante gestión del presidente libertario Javier Milei.
Los bonos en dólares de la Argentina reafirman la reciente tendencia ganadora. Los títulos Globales -en dólares con ley extranjera- avanzan este martes un 3% en Wall Street, para acumular una mejora promedio del 13% en cuatro rondas bursátiles en positivo. Los bonos de menor duration, con vencimiento en 2029 y 2030, encabezan las alzas con un 18% solo en febrero, tanto para los Globales como los Bonares, estos últimos con ley argentina.
No obstante, los agentes del mercado empiezan a reforzar su interés por los bonos en dólares con mayores plazos. El lunes destacó el salto de hasta 10% en pesos y 5% en dólares para los bonos AL35 y AL41.
En el mismo sentido, el riesgo país de JP Morgan, que miden la brecha de las tasas de retorno de los bonos del Tesoro de los EEUU con similares emisiones emergentes, recorta pasadas las 13:30 horas unos 47 enteros, a 1.742 puntos básicos, luego de haber tocado al mediodía los 1.706 puntos, un piso desde abril de 2022.
“Todas las señales de las dos últimas semanas fueron bastante constructivos co el crédito criollo. Desde la inflación menor a la esperada en enero -y datos alentadores de alta frecuencia para febrero-, la buena perspectiva fiscal de enero, la acumulación de dólares del BCRA, las lluvias recientes que mejoraron la condición hídrica del suelo en la zona núcleo en un momento crítico para el maíz y la soja, y el interés de muchos jugadores internacionales colaboraron en este punto”, detallaron desde Portfolio Personal Inversiones.
Motivos de la firme suba de los bonos
- Señal de austeridad fiscal. La economía real viene padeciendo por un proceso recesivos acentuado por la inflación más alta en 33 años, en medio del reacomodamiento de precios relativos. Pero la señales oficiales, que refuerzan la intención de una rápida corrección tendiente al equilibrio fiscal, han sido bien recibidas, en particular en la operatoria de los bonos soberanos, pues cuentas públicas en equilibrio garantizan el pago de esa deuda. En enero el sector público registró superávit financiero por primera vez desde enero de 2011. “En enero se concretó el mayor recorte real interanual de gasto público de los últimos 30 años. Con ingresos iguales que en 2023, toda la mejora del resultado fiscal fue explicada por la reducción del gasto”, resumieron los analistas del IARAF (Instituto Argentino de Análisis Fiscal).
- Recompras oficiales. En la licitación de bonos del Tesoro en pesos del viernes 16, el Ministerio de Economía adjudicó bonos por $4,9 billones, frente a vencimientos de 1,9 billones de pesos. La cartera que conduce Luis Caputo recompró con el excedente unos 3 billones de pesos de AL35 que mantenía la autoridad monetaria en su activo. Dicho monto representa aproximadamente 30% de la Base Monetaria, estabilizada en unos 10,5 billones de pesos. Esta iniciativa potenció el salto de precios para los Bonares 2035 y 2041, que se extendió el resto del universo de deuda soberana.
- Expectativas de desinflación. Los precios minoristas argentinos de febrero estarán “más cerca de 10% que de 20%”, afirmó el lunes el ministro de Economía, Luis Caputo, durante una entrevista televisiva, lejos del 20,6% que registró el país en enero. La tercera economía de América Latina registra la tasa de inflación más alta del mundo tras sufrir un incremento del 254,2% en los últimos doce meses. Asimismo, este lunes el INDEC difundió el Índice de Precios Mayoristas, que subió durante enero 18% y el Costo de la Construcción el 15,5 por ciento. De esta forma, ambos registros quedaron debajo de la inflación de enero que fue del 20,6 por ciento. Con estos incrementos, en los últimos doce meses, los precios mayoristas aumentaron 316,9% y el costo de la construcción el 251,5%, informó el organismo.
- Impulso desde el exterior. El ascenso de los papeles de deuda argentino tiene también un componente externo, dado el buen momento de los títulos públicos y privados emergentes en Wall Street. “Los spreads se han reducido significativamente en los últimos meses, junto con las crecientes expectativas de tasas de política monetaria más bajas y un aterrizaje suave para el crecimiento económico”, mientras que “las yields de los bonos corporativos han caído lejos de sus máximos de octubre de 2023, y ahora son notablemente más bajos que los niveles observados durante la mayor parte del año pasado”, explicaron los expertos de Schroders.
- Resilencia política. La mejora de los precios de los títulos públicos, que en el caso de las emisiones en dólares que fueron reestructuradas por el gobierno de Alberto Fernández alcanzan sus niveles más altos desde octubre de 2020, destacan más si se contempla que la administración de Javier Milei viene de una resonante derrota política en el Congreso, que rechazó su ambiciosa “Ley Ómnibus” con la que buscaba sentar las bases de una amplia desregulación económica prometida en campaña. “Estamos en equilibrio financiero en enero sin ley”, afirmó Luis Caputo hace dos semanas, y subrayó que “en el armado de ese paquete el 75% del ajuste fiscal ya estaba por fuera de la ley. No afecta en lo más mínimo a nuestro programa económico”.
- Acumulación de reservas. Las reservas internacionales netas del Banco Central siguen en terreno negativo, por unos USD 5.000 millones, aunque con una tendencia de recuperación notables, pues éstas alcanzaban los USD 11.000 millones negativos antes del recambio presidencial del 10 de diciembre. Con acumulación de dólares se garantiza el pago de la deuda externa y, en ese sentido, desde el 11 de diciembre el BCRA efectuó compras netas por USD 7.687 millones en el mercado, mientras que las reservas brutas crecieron a USD 26.857 millones unos USD 5.649 millones más que los USD 21.208 millones del 7 de diciembre.
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Fuente: Infobae.