La sargento Sofía Chaparro dijo a la justicia que acababa de retirar el vehículo de un taller mecánico y que se disponía a viajar a Buenos Aires junto a sus hijas. Sigue detenida, acusada del delito de «transporte de estupefaciente agravado por ser cometido por personal policial».
Fuentes judiciales informaron a Télam que en la mañana de este viernes se realizó una audiencia ante el juez federal de Garantías de Orán, Gustavo Montoya; quien, a pedido del Ministerio Público Fiscal, dispuso que la imputada Sofía Chaparro siga detenida con prisión preventiva por 60 días.
En la audiencia intervinieron el titular de la fiscalía descentralizada de esa ciudad salteña, José Luis Bruno; y la auxiliar María del Carmen Núñez.
La fiscal auxiliar Núñez informó en la mañana de este viernes a Télam que en una declaración -sin validez legal hasta tanto no sea ratificada o rectificada en sede judicial- que Chaparro hizo ante la policía tras la explosión de su auto, aseguró desconocer que había cocaína en el tanque de gas del vehículo y explicó que acababa de sacarlo de un taller mecánico.
Sin embargo, en la audiencia posterior ante el juez, y por consejo de su defensor, la acusada de abstuvo de declarar y sólo brindó algunos datos personales y de sus tres hijos de 9, 13 y 14 años, que estaban con ella cuando ocurrió el hecho.
Según indicó esta tarde el MPF, la mujer explicó que había viajado desde la provincia de Buenos Aires a salta «para que sus hijos tuvieran contacto con el padre de los mismos, de quien se separó recientemente, y que se hallaba en la ciudad de Colonia Santa Rosa por razones laborales»,
De acuerdo con el informe, tras esta exposición, la defensa indicó que la acusada no iba a declarar y pidió que le concedieran el arresto domiciliario para que pueda cuidar de sus hijos, dos de los cuales padecen una discapacidad.
Los voceros dijeron que el juez finalmente resolvió que Chaparro permanezca bajo prisión preventiva por los próximos 60 días, mientras sigue adelante la investigación en el marco de la causa en la que se le imputa el delito de «transporte de estupefaciente agravado por ser cometido por personal policial».
En tanto, fuentes de la Auditoría General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense informaron a Télam que la sargento fue apartada de sus funciones mientras avanza la pesquisa.
Según esos voceros, Chaparro se desempeñaba en la comisaría séptima de La Matanza, con sede en Villa Celina, aunque estaba con carpeta médica y había viajado a Corrientes y luego a Salta junto a sus hijos.