Maximiliano Pullaro habló de los cinco ataques con sello narco que tuvieron lugar en los últimos cuatro días en la ciudad de Rosario, y dejaron como saldo cuatro personas inocentes muertas a manos de sicarios.
El gobernador de Santa Fe aseguró que están cerca de encarcelar a los autores materiales a intelectuales de los ataques, y confió en que el Estado puede demostrar mayor poderío que las organizaciones criminales, a las que calificó como “muy violentas pero precarias”.
El mandatario santafesino ratificó que llegarán a las provincia integrantes del Ejército. También reconoció que la policía tiene agentes corrompidos que colaboran con los narcotraficantes o a veces participan ellos mismos del negocio, incluso dando ejemplos concretos. No obstante dijo que la decisión política de su gestión es depurar a la fuerza y contar con ella como herramienta para la pelea contra el crimen organizado.
“Hubo una reacción extrema por la pérdida de poder y negocios de estos grupos que estaban detenidos, pero fundamentalmente una pérdida de poder sobre sus propias estructuras, eso los llevó a cometer esos delitos que nos duelen como sociedad”, admitió Pullaro en una entrevista realizada por el periodista Nelson Castro desde Santa Fe para el canal de noticias TN.
Allí, el gobernador minimizó el impacto de la difusión de imágenes que realizó el gobierno local en la última semana, en la que se vio a reclusos arrodillados y en fila, en una pose similar a lo que sucede en las cárceles de El Salvador bajo la gestión del presidente de ese país, Nayib Bukele. “La violencia viene desde antes, y la comunicación a veces la maneja el propio servicio penitenciario. Indudablemente uno reflexiona sobre todas las cosas, pero nosotros no vamos a volver un milímetro sobre nuestros pasos”, dijo Pullaro.
El gobernador hizo un repaso de las investigaciones hasta el momento y adjudicó la última escalada de violencia a las medidas que tomó en los primeros meses de su gestión, apuntando a desbaratar la organización desde las cárceles. “Se mandaba a matar, robar, extorsionar. Eso cambió, y esas fueron las consecuencias. Se pretendía que volvamos atrás con las medidas que llevamos adelante en el servicio penitenciario”, contó el gobernador.
En las últimas 96 horas sicarios asesinaron a dos taxistas, un colectivero y un trabajador de una estación de servicio, con crímenes con connotaciones mafiosas. Sobre ello, Pullaro contó que “en varios de los hechos estamos muy cerca de individualizar a los autores materiales. En otros, nos acercamos a individualizar a los autores intelectuales. No sabemos quién los va a entregar, si sus conocidos o familiares”. Agregó además que “estuvimos ante hechos de terrorismo urbano”.