La canciller argentina, Diana Mondino, se comunicó con la embajadora de España en Argentina, María Jesús Alonso Jiménez, en un intento por contener la crisis diplomática que surgió tras las duras declaraciones del presidente Javier Milei durante una cumbre de ultraderecha en Madrid, organizada por el partido Vox.
Desde el Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina indicaron que la llamada fue breve y se desarrolló «en buenos términos». Esta comunicación se produjo en un contexto de creciente tensión entre ambos países, exacerbada por las palabras de Milei, quien calificó de «corrupta» a la esposa del presidente español Pedro Sánchez.
La crisis diplomática llevó a Alonso Jiménez a abandonar Argentina el pasado domingo por la noche, partiendo desde el aeropuerto de Ezeiza. Su regreso a España responde a una orden del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, quien la llamó a consultas «sine die», un mecanismo de protesta diplomática que implica la retirada temporal del embajador.
Pese a los intentos de contención por parte de Mondino, desde el Gobierno nacional descartaron la posibilidad de que Milei pida disculpas por sus declaraciones. El vocero presidencial, Manuel Adorni, reafirmó esta postura al mediodía: «Algunos están reclamando disculpas; disculpas no va a haber, no hay de qué. En tal caso apelamos a que el gobierno español pide disculpas tras los sistemáticos ataques», dijo, haciendo referencia a las acusaciones del ministro de Transporte de España, Óscar Puente, quien insinuó que Milei podría estar «ingiriendo sustancias».
Esta situación ha tensado aún más las relaciones entre Argentina y España, generando preocupación sobre posibles repercusiones diplomáticas y económicas. Se espera que las autoridades de ambos países continúen dialogando para evitar una escalada mayor del conflicto.
