La gestión de Javier Milei enfrenta una severa crisis interna con múltiples renuncias en el Ministerio de Capital Humano, dirigido por Sandra Pettovello, tras la controversia por alimentos almacenados. La inestabilidad se extiende a otras áreas clave del gobierno.
A casi seis meses de asumir el poder, el gobierno de Javier Milei atraviesa uno de los momentos más difíciles de su gestión debido a una serie de renuncias en el Ministerio de Capital Humano, encabezado por Sandra Pettovello. La controversia surgió a raíz de la acumulación de alimentos en los depósitos de la cartera, desencadenando la salida de numerosos funcionarios.
El escándalo comenzó con la renuncia de Pablo De la Torre, exsecretario de Niñez, Adolescencia y Familia, y desde entonces, más de 40 funcionarios han abandonado sus puestos. La más reciente baja significativa es la de Fernando Szereszevsky, jefe de asesores de Pettovello y amigo personal de la ministra. Szereszevsky, que había evaluado su salida el mes pasado, presentó su renuncia formalmente aduciendo motivos personales y laborales. Antes de ingresar a la función pública, Szereszevsky tuvo una destacada carrera como manager de artistas, trabajando con figuras como Charly García y Juanse, el cantante de Ratones Paranoicos.
El impacto del escándalo ha sido profundo, afectando la estabilidad del gobierno en varias áreas. En Capital Humano, otras renuncias notables incluyen a Maximiliano Keczeli, exsecretario de Coordinación Legal y Administrativa; Gerardo Marcelo Hita, exdirector del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales; y Juan Ignacio López Montoiro, exsubsecretario de Gestión Administrativa, entre otros.
La ola de dimisiones no se limita a Capital Humano. Diversas secretarías y dependencias del gobierno han registrado bajas importantes. En la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, además de De la Torre, renunciaron Héctor Nicolás Calvente, María Lucía Raskovsky y Fernando de la Cruz Molina Pico, entre otros. En la Secretaría de Trabajo, figuras como Omar Yasín y Horacio Pitrau también abandonaron sus cargos.
La ANSES, por su parte, sufrió la salida de su exdirector ejecutivo, Osvaldo Giordano, y del subdirector, Gervasio Corach. La Secretaría de Educación vio la renuncia de María Plá Alba, María de los Ángeles Reig, Silvana Gyssels y José Richards, mientras que la Secretaría de Cultura perdió a Federico Iglesias, Matías Vitale y Joaquín Wagner.
Este éxodo masivo de funcionarios plantea serios desafíos para el gobierno de Milei, que ahora debe enfrentar las consecuencias del escándalo por los alimentos acumulados y la necesidad de reestructurar diversas áreas clave de su administración. La creciente inestabilidad interna amenaza con complicar aún más la gestión de políticas públicas en un contexto de alta demanda social y económica.
