La jueza federal de Goya, Cristina Pozzer Penzo, encabezó este domingo por la tarde una serie de procedimientos en la denominada zona cero, punto clave del caso en el paraje Algarrobal de la localidad de 9 de julio, en Corrientes. Es que allí fue el último rastro de Loan Danilo Peña, el nene de 5 años del que nada se sabe desde el 13 de junio pasado, cuando salió de la casa de su abuela Catalina para ir a buscar naranjas, a uno 600 metros de distancia.
“Fue una inspección ocular”, comentó la magistrada cerca de las 20 cuando dejó la zona y contó que también estuvo el fiscal federal de Goya, Mariano de Guzmán.
En paralelo a que se hicieran los procedimientos, José, uno de los hermanos del niño desaparecido, dijo: “Yo solo quiero saber dónde está mi hermanito”.
Ya pasaron 38 días de la desaparición y pocas son las pistas que hay sobre el paradero del niño y son ocho los detenidos, acusados por la sustracción del menor: Antonio Benítez, Mónica Millapi, Daniel Ramírez, María Victoria Caillava, Carlos Pérez, Walter Maciel, Laudelina Peña y Francisco Amado Méndez.
“Nadie dice nada certero sobre Loan, esperamos que alguien hable y aparezca pronto”, sostuvo José en diálogo con la agencia NA. Consultado sobre las distintas hipótesis que existen alrededor del caso y que involucran a varios familiares, dijo: “Hay muchas hipótesis y no hay que descartar ninguna”.
Al referirse al rol de su tía Laudelina Peña, quien se encuentra presa por el caso, expresó que se trata de un tema sensible para la familia: “Imagínese a mi papá… Yo estuve con ella seis, siete días, en ningún momento me dijo nada”. Además, enfatizó que a la hermana de su padre “no” le cree “más nada, que se encargue la Justicia de ella”.
A casi 40 días de la desaparición del pequeño Loan, la investigación todavía no se acerca a determinar qué fue lo que pasó una jornada en la que el niño fue a almorzar a la casa de su abuela junto a su padre. Y, en ese contexto, la jueza del caso este domingo regresó a la zona cero.
Primero, la magistrada fue hasta la casa de Abundio Escobar, un ambulanciero que el 20 de junio declaró ante la justicia de Corrientes. “Escuché gritos de un nene llamando a la madre”, dijo el hombre ante los fiscales provinciales. Y narró que eso sucedió alrededor de las 18.30 de ese 13 de junio.
Por eso es clave el regreso de las autoridades al lugar y también sobre la base de los dichos del ambulanciero que está casado con la directora del Hospital de 9 de julio.
La jueza Pozzer Penzo, junto a una de sus secretarias, acompañaba a las fuerzas de seguridad en los rastrillajes que se realizan la tarde de este domingo en la localidad de 9 de Julio, también en la zona cero, donde se harán planos y fotografías del terreno.
Mientras tanto, la causa volvió al secreto de sumario luego de una semana en la que se indagó a la mayoría de los detenidos. Justamente, el ex comisario Maciel fue el último en declarar. Dijo que está “detenido de forma injusta” y remarcó que está “preparado para ser policía, no un preso”.
Maciel está apresado junto a siete personas más, acusados de “sustracción y ocultamiento” del menor. La indagatoria que la jueza federal de Goya le tomó al jefe policial fue presencial y duró unas cinco horas. En ese tiempo, apuntó contra Laudelina y otras actitudes sospechosas por parte del resto de la familia.
“Al entrar al camino vecinal, alrededor de las 16:30, lo primero que me encuentro es un hombre, que se movilizaba en una motocicleta, sin remera, todo sudado. Me llamó poderosamente la atención”, describió en alusión a Benítez, esposo de Laudelina.
Sobre el padre de Loan, reveló: “Para mí no estaba normal. Tenía aliento etílico. Me dice que es José Peña. Le pregunto por qué no está buscando a su hijo, a lo que me dice: `Ya va a salir’”.
Y sostuvo que Laudelina le mencionó que Loan se había perdido a las 14:30 y que, cuando se le consultó por qué tardó tanto en llamar a la Policía, agregó: “Me puso una excusa de la señal o el crédito”