En medio de la controversia generada por las denuncias de Fabiola Yañez contra Alberto Fernández por hostigamiento y violencia de género, el presidente Javier Milei ha respaldado un proyecto que busca retirar la pensión vitalicia a expresidentes y vicepresidentes que hayan sido procesados o condenados penalmente.
Con el avance de la causa judicial en la que la exprimera dama acusa a su antecesor, Milei ha reavivado el debate sobre el régimen de pensiones de privilegio. Este régimen permite que los exmandatarios reciban una jubilación vitalicia una vez que abandonan sus funciones, un beneficio que ahora está en el centro de la polémica.
El presidente utilizó sus redes sociales para manifestar su apoyo al proyecto presentado por el diputado Damián Arabia, del PRO, que propone revisar la legislación vigente. Arabia anunció en la plataforma «X» (anteriormente Twitter) que ha impulsado una ley para remover la pensión a los presidentes y vicepresidentes condenados, y suspenderla provisionalmente en caso de que sean procesados.
«No es jubilación, es un privilegio», declaró Arabia en su publicación, la cual fue replicada por Milei, quien añadió: «Me encanta la idea… Desde mi visión, las jubilaciones no deberían existir y por ello yo renuncié a la misma…». Esta postura refuerza la agenda de Milei, que ha mostrado inclinación por reducir los beneficios económicos asociados a la función pública, en un contexto donde su gobierno enfrenta críticas por el creciente desempleo y las políticas de privatización de empresas estatales.