La medida, oficializada en el Boletín Oficial y firmada por el presidente Javier Milei, prohíbe la sucesión de cargos públicos por vínculos familiares. La norma busca asegurar la igualdad en el acceso a empleos en el Estado.
En una histórica decisión, el Gobierno Nacional eliminó el sistema de cargos hereditarios en la administración pública, medida que fue oficializada el domingo a través del Boletín Oficial. Firmada por el presidente Javier Milei, la normativa, mediante el decreto 959/24, establece que en el sector público no se admitirán privilegios basados en vínculos familiares. Esta disposición impide que cónyuges o familiares de empleados estatales fallecidos ocupen su puesto en reemplazo, en un esfuerzo por fortalecer el principio de igualdad en el acceso a los empleos estatales.
El decreto responde a una estrategia de “racionalización del tamaño del Estado,” como lo indicó el Ministerio de Desregulación y Modernización en un comunicado. Esta medida se suma a otras iniciativas, como el recorte del 15% de la planta del personal y la intimación a empleados en edad de retiro para que se jubilen. Los funcionarios de primera línea, incluyendo al vocero presidencial Manuel Adorni y al ministro Federico Sturzenegger, habían anticipado que el objetivo es asegurar que los cargos públicos se asignen solo por mérito e idoneidad, eliminando beneficios particulares.
Según el comunicado, “el ilógico privilegio” de la sucesión de cargos públicos colocaba a los empleados estatales por encima de otros trabajadores en Argentina. Con esta normativa, el Gobierno Nacional se compromete a una política de empleos públicos accesibles solo en base al mérito, reforzando un enfoque igualitario y transparente en las contrataciones en el sector público.