El gremio de camioneros, liderado por Pablo Moyano, confirmó un paro que dejará a las estaciones de servicio sin suministro el 30 de octubre. Aun así, la baja demanda asegura que la medida no afectará la provisión en el corto plazo.
El próximo 30 de octubre, el sindicato de camioneros, encabezado por Pablo Moyano, paralizará el reparto de combustibles en todo el país. La medida, que abarca nafta y gasoil, afectará la logística y el transporte en todas las provincias, ya que los trabajadores del sector combustible se adhieren al paro general lanzado por la Confederación General del Trabajo (CGT). Aun así, el gremio prevé que las estaciones de servicio podrían enfrentar demoras en la reposición de sus productos.
Pese a la contundencia de la protesta, la baja demanda de combustibles que enfrenta el país desde hace meses limitará los impactos en el suministro. Según Faruk Jakaf, presidente de la Cámara de Expendedores de Combustibles del Noreste Argentino, la caída en las ventas, que en ciertas zonas alcanza un 50% en comparación con el año anterior, permitirá a muchas estaciones mantener existencias durante la huelga. “Tenemos acumulación de producto en varios puntos, lo que garantiza que no habrá cortes de stock,” afirmó Jakaf.
La situación genera preocupación en provincias fronterizas como Misiones y Formosa, donde la falta de competitividad con respecto a Brasil y Paraguay ha disminuido la afluencia de clientes extranjeros. Sin embargo, Jakaf aseguró que la duración de la medida, de apenas 24 horas, evitará una crisis en el sector y minimizará el impacto en el abastecimiento de combustibles en el país.