La votación definirá el sucesor de Luis Lacalle Pou y la composición parlamentaria para el periodo 2025-2030, mientras que los votantes también se pronunciarán sobre reformas en seguridad social y allanamientos nocturnos.
Este domingo se abrieron los 7.225 circuitos de votación en Uruguay para elegir al próximo presidente y renovar el Parlamento, en una jornada en la que 2.727.120 ciudadanos, con voto obligatorio, definirán el futuro político del país. Yamandú Orsi, del Frente Amplio, lidera las encuestas con un 45%, seguido por Álvaro Delgado, del Partido Nacional, con un 25%. De no alcanzar la mayoría absoluta, un balotaje decidirá el ganador el 24 de noviembre.
Los votantes también se pronunciarán sobre dos plebiscitos de reforma constitucional: uno para elevar la edad mínima jubilatoria a 60 años y eliminar el sistema previsional privado, y otro que habilitaría los allanamientos nocturnos en hogares. Aunque el actual presidente Luis Lacalle Pou goza de una aprobación del 51%, la popularidad no ha sido suficiente para asegurar una ventaja a su partido en esta elección.
La jornada electoral cuenta con la participación de 40.000 funcionarios y la vigilancia de 6.000 efectivos de las Fuerzas Armadas, y está sujeta a estricta veda de propaganda desde el viernes.
