Tras su disolución y reconversión en APESAU, la histórica agencia de noticias Télam redefine sus funciones y enfrenta un proceso de reorganización laboral y operativa que aún genera debate y desafíos.
Cuatro meses después de que el gobierno de Javier Milei decretara la disolución de la agencia Télam, la histórica entidad de noticias del Estado argentino se encuentra en un nuevo escenario como la Agencia de Publicidad del Estado Sociedad Anónima Unipersonal (APESAU). Su rol, ahora limitado a la gestión de publicidad estatal, marca un cambio radical en su misión y reduce significativamente su histórica influencia en el ámbito informativo.
La transición no ha sido fácil. De los 770 empleados que integraban la agencia, unos 370 aceptaron retiros voluntarios, mientras que 110 se unieron a APESAU y alrededor de 200 pasaron a formar parte de la empresa Contenidos Públicos, que abastece de noticias y materiales a medios públicos como la TV Pública, Radio Nacional y Canal Encuentro. Este cambio de funciones ha significado una reestructuración que todavía plantea interrogantes sobre la estabilidad laboral y las oportunidades profesionales para el personal que quedó en APESAU y en Contenidos Públicos.
Los trabajadores de Télam, que antes lideraban la producción informativa estatal, enfrentan un proceso de adaptación que incluye el aprendizaje de nuevas competencias en publicidad y comunicación institucional, un giro estratégico que sigue despertando controversias en el ámbito político y gremial. La decisión de transformar la agencia en una plataforma publicitaria, según las autoridades, busca optimizar los recursos y responder a las necesidades actuales del Estado. Sin embargo, para muchos, esta transformación representa una pérdida del rol tradicional de Télam como agente de comunicación pública e informativa.
El caso de Télam sigue siendo un tema de debate entre quienes defienden su reconversión y aquellos que ven en este cambio una reducción de la pluralidad y la transparencia informativa estatal, un aspecto clave que, tras décadas de historia, hoy está en plena revisión.
