En un fallo inédito, la titular del Juzgado Civil y Comercial N°9, Alejandra Antúnez, decretó la inejecutabilidad de un inmueble en proceso de subasta, protegiendo así los derechos de una mujer de la tercera edad, cuya salud se vería afectada por el desalojo.
En una decisión relevante, la titular del Juzgado Civil y Comercial N°9 de la ciudad, doctora Alejandra Antúnez, dictó la inejecutabilidad de un inmueble que iba a ser subastado para satisfacer deudas de una mujer en proceso de quiebra. El pedido de suspensión fue presentado por la hija de la mujer, quien alegó que el desalojo podría empeorar la salud de su madre, una adulta mayor con enfermedades crónicas y bajo tratamiento psiquiátrico.
La jueza resolvió favorablemente, basándose en los informes médicos que acreditan que la mujer requiere un entorno estable para no poner en riesgo su salud. Además, la magistrada hizo hincapié en que un cambio de residencia en estas condiciones podría derivar en consecuencias graves para su bienestar.
El fallo se apoya en los principios constitucionales que protegen el derecho a la vivienda digna y la especial tutela de los adultos mayores, tal como lo establece la Constitución Nacional y los tratados internacionales ratificados por Argentina. La jueza recordó que el derecho a la salud y la vivienda deben prevalecer sobre las necesidades del proceso de quiebra, subrayando que los derechos fundamentales están por encima de cualquier otra consideración normativa. “Es inadmisible que se vulneren derechos de terceros ajenos al conflicto, especialmente cuando se encuentran en condiciones de vulnerabilidad”, sentenció Antúnez.