El Gobierno celebró en Córdoba la inauguración de la reversión del Gasoducto Norte, una infraestructura crucial que permitirá llevar el gas natural de Vaca Muerta a siete provincias del norte argentino, sustituyendo importaciones por aproximadamente USD 1.000 millones. Este proyecto, uno de los más significativos en materia de obra pública, sobrevivió a los ajustes presupuestarios implementados por la administración de Javier Milei y abre la posibilidad de futuras exportaciones de gas a Brasil.
El acto contó con la presencia del jefe de Gabinete, Guillermo Francos; el ministro de Economía, Luis Caputo; y otras autoridades, como el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora. La obra beneficiará a Córdoba, Tucumán, La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero, Salta y Jujuy, impulsando el desarrollo económico y reduciendo los costos energéticos en la región.
Damián Mindlin, presidente de SACDE, destacó que esta inversión pone fin a 20 años de importación de gas boliviano, remarcando la importancia de utilizar los recursos nacionales para el desarrollo energético del país. La obra, que requirió USD 713 millones de inversión, fue financiada en gran parte por el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF).
El proyecto promete un ahorro significativo y subraya la necesidad de mayor inversión privada en infraestructura energética para fortalecer la economía nacional y garantizar la continuidad de las obras estratégicas.
