A días del cierre de sesiones ordinarias, el Gobierno dilata las conversaciones con gobernadores opositores y estudia alternativas para el debate en el Congreso.
La Casa Rosada sigue sin definir si reabrirá el Congreso para discutir el Presupuesto 2025, generando tensiones con los gobernadores de Juntos por el Cambio. Los mandatarios buscan reactivar las negociaciones antes del 30 de noviembre, pero desde el oficialismo apuntan a sostener el equilibrio fiscal y priorizan proyectos como Ficha Limpia y Democracia Sindical.
Aunque cercanos a Javier Milei no descartan un diálogo, destacan que las demandas provinciales exceden los límites económicos. En tanto, el Gobierno evalúa alternativas como dejar sin tratamiento el Presupuesto y mantener el de 2022, mientras las fuerzas opositoras unifican estrategias para presionar.