Con una destacada mayoría legislativa, la provincia de Chaco aprobó un crédito internacional por 145 millones de dólares, destinado a potenciar obras de infraestructura esenciales. El proyecto, que logró 25 votos afirmativos y apenas dos negativos, fue celebrado como un avance significativo para abordar las necesidades en energía, agua y vialidad.
De los fondos aprobados, 25 millones de dólares serán distribuidos entre los municipios según un esquema de coparticipación, un aspecto que generó intensos debates. Mientras algunos legisladores destacaron la inclusión de las comunas en el financiamiento, otros expresaron reparos sobre los plazos de devolución estipulados, que se extenderán a un año en lugar de los cuatro meses originalmente previstos.
Iván Gyoker, titular de la Comisión de Hacienda, señaló que estos recursos son indispensables para enfrentar las emergencias en sectores críticos, aunque reconoció que no resolverán por completo las deficiencias estructurales. En una línea similar, Nicolás Slimel resaltó la importancia del consenso alcanzado, aunque cuestionó las modificaciones en los términos para los municipios.
No obstante, el crédito no estuvo exento de críticas. Los diputados Teresa Cubells y Rodolfo Schwartz votaron en contra, citando falta de claridad en algunos aspectos del proyecto y cuestionando el endeudamiento en moneda extranjera. A pesar de ello, Schwartz reconoció el potencial impacto positivo que podría tener la reactivación de la obra pública.
El plan incluye un control riguroso del uso de los recursos, con auditorías trimestrales a cargo de la Comisión de Hacienda. De los 145 millones, 120 millones se destinarán directamente a obras provinciales, con el objetivo de impulsar un desarrollo sostenible y fortalecer los servicios públicos en todo el territorio chaqueño.
La iniciativa fue destacada como un ejemplo de colaboración institucional en beneficio de los ciudadanos, según lo expresó Atlanto Honcheruk, presidente del interbloque Frente Chaqueño.