El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ofreció su primer discurso internacional tras su regreso a la Casa Blanca en el Foro Económico Mundial de Davos. Durante su intervención, hizo un llamado a las empresas globales para que trasladen su producción a EE.UU., destacando los beneficios fiscales como incentivo. “Mi mensaje es sencillo: vengan a fabricar en Estados Unidos, y tendrán uno de los impuestos más bajos del mundo”, afirmó.
Trump también se refirió a la situación en Ucrania, describiéndola como un “campo de asesinatos” y expresando su intención de reunirse con Vladimir Putin para buscar una solución pacífica al conflicto. Además, subrayó la importancia de reducir los precios del petróleo, argumentando que una disminución podría poner fin a la guerra entre Rusia y Ucrania.
El presidente reiteró su enfoque en la política comercial proteccionista, advirtiendo que las empresas que no trasladen sus operaciones a EE.UU. enfrentarán aranceles significativos. “Si no fabrican en nuestro país, tendrán que pagar un arancel”, declaró.
Trump concluyó destacando los esfuerzos de su administración para lograr la paz en Ucrania y fortalecer la economía estadounidense mediante una mayor producción nacional y la inversión extranjera.