Por medio de un comunicado y en la antesala a un paro nacional de gremios universitarios, desde el Consejo Interuniversitario Nacional emitieron un comunicado renovando el reclamo por mayores fondos para el funcionamiento de las instituciones. “Los recursos que se destinan al funcionamiento de nuestras casas de altos estudios apenas alcanzan a un 50 % para el 2025”, advierten. También exigen una “imprescindible” mejora de salarios para trabajadores docentes y no docentes. Alertan además por las becas que “están congeladas” y por lo que consideran la intención oficial de “abortar el desarrollo científico y tecnológico autónomo de nuestra Nación”.
Bajo el título “Nuevo año, los mismos problemas”, desde el Comité Ejecutivo del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) se pronunciaron expresando su “profunda preocupación por la crisis presupuestaria que atraviesan las universidades nacionales por la falta de actualización de los gastos para su funcionamiento” y reclamaron “la urgente e imprescindible recomposición salarial para docentes y nodocentes”, así como, también, “la reconstrucción del sistema de investigación, ciencia y tecnología, la reinversión en infraestructura universitaria y la actualización del sistema de becas para nuestros y nuestras estudiantes”.
En la reunión que las rectoras y rectores de universidades públicas de todo el país mantuvieron el pasado miércoles 12 de marzo de 2025, “se expresó la honda inquietud por el incumplimiento de principios y regulaciones previstos en nuestra Constitución Nacional y las leyes que la reglamentan”, señala el comunicado del CIN.
“Por manifiesta voluntad del gobierno, la administración nacional y el sistema universitario público argentino no cuentan con un presupuesto para el ejercicio del 2025. Esto significa que el Poder Ejecutivo Nacional puede disponer discrecionalmente, sin ningún tipo de control, de los fondos que surgen del pago de los impuestos que realiza cada argentina y cada argentino. De esta forma, el país no cuenta con una hoja de ruta que garantice el funcionamiento económico y financiero de las instituciones del país”, aseguran.
“En este contexto adverso, el sistema universitario público argentino atraviesa una seria situación de desfinanciamiento en todos los ámbitos de su desempeño institucional. Los problemas que señalamos en febrero de 2024 continúan e, incluso, en varios aspectos se han agravado”, se afirma en el texto.
“Las paritarias no funcionan”
Las rectoras y rectores reclaman que “las paritarias salariales no funcionan y los magros incrementos otorgados por decreto, lejos de recomponer la pérdida del poder adquisitivo de los salarios, continúan agravando la situación con aumentos por debajo de la inflación”.
Reclaman también que “las becas estudiantiles están congeladas desde agosto del 2024 y sus montos están alejados de cubrir necesidades mínimas”.
“Los recursos que se destinan al funcionamiento de nuestras casas de altos estudios apenas alcanzan a un 50 % para el 2025”, advierten.
“Abortar el desarrollo científico y tecnológico autónomo”
“El sistema de investigación, ciencia y tecnología que, en su inmensa mayoría, reside en las universidades nacionales, es víctima de una drástica reducción de recursos que parece tener por objetivo abortar el desarrollo científico y tecnológico autónomo de nuestra Nación”, señala con contundencia otro párrafo del comunicado en el que se aborda la realidad del sistema científico nacional.
Y las “obras de ampliación, mejora y mantenimiento de la infraestructura universitaria están totalmente paralizadas, dejándolas libradas a los posibilidades económicas de cada institución”, agregan.
Así, “pedimos de manera URGENTE buscar, en conjunto con el gobierno nacional, generar las alternativas de solución a los problemas ya planteados”.
El CIN hace también “un llamamiento a las comunidades universitarias de todo el país a seguir trabajando en defensa de la democracia, de la educación pública y del sistema universitario público argentino, y a reforzar el diálogo con nuestras comunidades para poner en valor los aportes de la educación, la investigación, la ciencia y la tecnología para el desarrollo nacional”.
“Tenemos la convicción de que debe primar el diálogo y el consenso. Consideramos imprescindible la unidad nacional por sobre la cultura de la provocación y el conflicto, para construir un proyecto de país independiente y solidario”, afirman.
“En un mundo en el que el conocimiento es presente y futuro, es INCONCEBIBLE e IMPERDONABLE no invertir en educación como país”, concluye el texto.