Aunque aún requiere de ventilación mecánica no invasiva, el papa Francisco ha retomado algunas de sus tareas laborales, combinando estas con momentos de descanso, según informó el Vaticano.
El Vaticano ha emitido un informe optimista sobre la salud del papa Francisco. Según el último comunicado, el pontífice ha mostrado una leve mejoría al no presentar nuevas crisis respiratorias y ha pasado el día realizando sesiones de fisioterapia respiratoria y “terapia motora activa”. A lo largo del día, se ha mantenido en su sillón, alternando actividades laborales con períodos de descanso.
El informe detalla que el papa continúa recibiendo oxigenoterapia de altos flujos a través de cánulas y que, por la noche, volverá a utilizar ventilación mecánica no invasiva. Esta modalidad de apoyo respiratorio, que se realiza mediante una mascarilla sin necesidad de intubación, sigue siendo parte de su tratamiento.
A pesar de estos signos positivos, el cuadro clínico general de Francisco continúa siendo delicado, y su pronóstico sigue siendo reservado.
En este Miércoles de Ceniza, una fecha importante para los católicos que marca el inicio de la Cuaresma, el papa ha participado en la bendición de las cenizas desde su apartamento en la décima planta del hospital Gemelli en Roma, donde permanece hospitalizado desde mediados de febrero. También se informó que el pontífice ha vuelto a comunicarse con el párroco de la Sagrada Familia, en la Franja de Gaza, una parroquia a la que ha estado llamando regularmente.
