Los trabajadores del Correo Argentino adhirieron a la protesta nacional convocada por FOECYT. Reclaman recomposición salarial y denuncian la pérdida del poder adquisitivo.
Las oficinas del Correo Argentino en Corrientes amanecieron este martes con las persianas bajas. Sin atención al público y con carteles que anunciaban la medida de fuerza, los trabajadores postales concretaron un paro por 24 horas en el marco de una protesta nacional liderada por la Federación de Obreros y Empleados de Correos y Telecomunicaciones (FOECYT).
La huelga, que afectó todas las sucursales de la provincia, se inscribe en un plan de lucha más amplio que incluye movilizaciones y nuevas jornadas de paro a lo largo de la semana. Según los referentes gremiales, la protesta surge ante la falta de una propuesta salarial seria por parte de la conducción del Correo Argentino, que habría ofrecido un 2,7% de incremento frente a una pérdida del 80% del poder adquisitivo solo en lo que va del año.
Desde FOECYT apuntan a una conducción “cerrada al diálogo” y a decisiones unilaterales por parte de las autoridades de la empresa estatal. Aseguran que, pese a haber acompañado procesos de modernización y ajuste interno, no han recibido respuestas acordes al esfuerzo de los trabajadores.
El conflicto se da en un contexto de creciente tensión dentro del empleo público nacional. A los reclamos del sector postal se suman los de otras áreas estatales como Vialidad, organismos tributarios y diversos ministerios, donde los recortes y la congelación de salarios alimentan un malestar generalizado.
Mientras tanto, la protesta continuará este miércoles con asambleas y una movilización nacional, y se sumará el jueves al paro general convocado por la CGT. El gremio postal anticipó que, de no haber avances, no descartan endurecer aún más las medidas en las próximas semanas.